Preocupa la situación de crisis económica de la empresa Georgalos
Las ventas cayeron un treinta por ciento y hubo suspensiones de personal. Desde el gremio descartaron que corra riesgo la fuente de trabajo

En las ultimas semanas un gran numero de vecinos hicieron conocer a los medios de prensa locales su preocupación por la critica situación financiera que atraviesa la tradicional empresa Georgalos Hnos., un icono de la historia industrial de la ciudad
Hasta hace unos días los trabajadores debieron sufrir suspensiones y la planta estuvo parada para ahorrar energía y gastos fijos, aunque si se pagaron los salarios.
Desde el gremio, el miembro del Sindicato de Trabajadores de Industrias de la Alimentación (STIA), Miguel Carranza, dijo en declaraciones a Radio Ciudad FM 93.5 de Río Segundo, que la empresa “no había realizado un procedimiento de crisis porque se estaban tramitando algunos subsidios, incluso desde el gremio hemos colaborando, como lo hemos venido haciendo durante todo este tiempo, gestionando algunas ayudas para poder afrontar el pago de sueldos”.
El dirigente sindical señaló también que “el gremio viene haciendo un gran esfuerzo económico para ayudar a paliar la crisis de la empresa”, y puso como ejemplo que han aceptado recibir casi anualmente el pago de las retenciones de obra social, las retenciones de cuota sindical, prestamos, farmacia y proveeduría.
Según Carranza Georgalos adjudica este parate a una caída en las ventas de un 30% y esta situación se ve agravada porque “no tiene acceso al crédito sino que está funcionando con lo que vende y cobra, a causa de una convocatoria de acreedores que ya lleva 8 años”.
El sindicalista dijo que la empresa también culpó a la gripe aviar por las caídas en las ventas ya que “la gente salió menos y por lo tanto ha consumido menos y los chicos dejaron de ir a la escuela y consumir sus productos”.
Actualmente la planta de Río Segundo produce caramelos, el postre Ñucrem, alfajores y toda la línea de chocolates, pero casi no exporta golosinas sino solo cereales principalmente maní.
Georgalos, que fue fundada en 1939, cuenta en estos momentos con casi cuatrocientos trabajadores entre efectivos y temporarios, un numero ostensiblemente menor al del año 1985 en que llegó a emplear a casi mil quinientos trabajadores. “La nomina se fue achicando –se quejó Carranza- porque primero se vendió la parte de la glucosa, luego el Mantecol y así se han vendido las alhajas de la abuela”.
Al analizar algunas de las causas de la debacle el gremialista opinó que “Georgalos carece de una política agresiva de marketing y de una optima inserción en los canales de venta a diferencia de Arcor que tiene un canal de distribución de sus productos similar al de la Coca Cola, con preventistas que caminan constantemente la calle y a esto Georgalos todavía no lo ha podido conseguir”.
Carranza se quejó también de que “si bien en los últimos años hubo una importante inversión en la planta de Río Segundo, las decisiones muchas veces se toman desde Buenos Aires y es muy difícil desde un escritorio tomar contacto con la realidad”.
De todos modos, y para tranquilizar a la población y principalmente a los trabajadores y sus familias desestimó de plano que corra riesgo la fuente de trabajo: “a pesar de la gravedad de la crisis no hay que generar una psicosis de que Georgalos cierre y se vaya de Río Segundo, sino que ha sufrido un traspié y le estamos poniendo el hombro entre todos”, expresó el representante del STIA.
El parate de Georgalos se suma a la difícil situación económica que atraviesa la Municipalidad local, dos de los principales empleadores de la ciudad, lo que ha resentido notablemente las ventas en casi todo el sector comercial de esta localidad.