En la antesala del Bicentenario habrá una fiesta del estilo Super Bowl en la que actuarán artistas de la talla de Shakira, Ricky Martin y Fito Páez. Vicentico entonará el himno
Pese a que Diego Maradona se había manifestado contrario a la idea, el próximo lunes 24 de mayo la selección nacional de fútbol tendrá su despedida formal de la Argentina, antes de emprender viaje a Sudáfrica, con un partido amistoso ante Canadá que será, apenas, un condimento más de la jornada “popular” que el Gobierno está organizando como uno de los fastuosos festejos del Bicentenario de la Nación.
Ese lunes, en el estadio de River, y rodeando a Lionel Messi, Gonzalo Higuaín, Carlos Tevez y Javier Mascherano, entre las tantas figuras que el “10” llevará al Mundial, habrá grandes sorpresas con un show lumínico, visual y artístico de nivel internacional con estrellas que empezarán a definirse esta tarde cuando funcionarios estatales y Guillermo Tofoni, presidente de World Eleven, la empresa organizadora, se reúnan para definir los aspectos “finitos”.
La idea es que el partido comience a las 19.15, y que el espectáculo previo arranque a las 18, con un in crescendo que tendrá su momento culminante minutos antes de las 19 con un repentino apagado de luces para que, con el fondo de una música intensa acompañados de rayos láser, desemboquen en el Monumental un par de helicópteros. De las máquinas descendería, para cantar uno o dos temas, alguna de los cantantes internacionales que el Gobierno tiene contratados y que pondría a disposición para este evento, siendo los nombres más probables los de Ricky Martin, Shakira, o el colombiano Carlos Vives, idolatrado por Maradona. De igual modo, un reconocido actor argentino (¿Ricardo Darín?) aterrizaría en el círculo central para llevar a cabo una lectura vinculada con el hecho histórico que se conmemora.
Por supuesto, que en semejante fiesta no podrá faltar la ejecución del Himno Nacional Argentino, que será entonado por el cantante Vicentico, quien estará acompañado, en un semicírculo, por todo el plantel argentino que jugará el Mundial más un grupo de “notables invitados” compuesto por viejas glorias del deporte nacional sobresaliendo, desde ya, los integrantes de los seleccionados que se consagraron campeones del mundo en Argentina ‘78 y México ‘86. También desfilarían, entre otros seleccionados recordados, planteles destacados de Los Pumas y Las Leonas. Tal vez, también, diga presente la presidenta Cristina Fernández de Kirchner o algún funcionario destacado del Gobierno.
Quienes tengan la posibilidad de acceder al Estadio adquiriendo su entrada por Ticketek a los mismos precios que costó ver el agónico triunfo ante Perú, en la última Eliminatoria Sudamericana, o estén sentados frente a la pantalla de Canal 7, se encontrarán, renglón seguido, con Fito Páez y su piano con el ya clásico “Y dale alegría a mi corazón”. Emoción garantizada.
Tal vez ese sea el final del show, antes del “cotillón” de ocasión que, por supuesto, incluirá los legendarios papelitos blancos y celestes. Y empezará a rodar la pelota, y a volar la imaginación de los tantos futboleros argentinos que querrán darle su voz de aliento a una Selección que, aun con tropiezos y varios pasos en falso, llegará a la cita mundialista con la firme ilusión de repetir viejas epopeyas a partir del extraordinario momento por el que atraviesan muchos de los jugadores que, finalmente, integrarán la famosa lista de 23. Después vendrá el debut ante Nigeria, y los choques con Corea del Sur y Grecia que permitirán establecer para qué está el equipo. Pero para esos capítulos, todavía falta. La primera cita será en Núñez, el 24.
Ese lunes, en el estadio de River, y rodeando a Lionel Messi, Gonzalo Higuaín, Carlos Tevez y Javier Mascherano, entre las tantas figuras que el “10” llevará al Mundial, habrá grandes sorpresas con un show lumínico, visual y artístico de nivel internacional con estrellas que empezarán a definirse esta tarde cuando funcionarios estatales y Guillermo Tofoni, presidente de World Eleven, la empresa organizadora, se reúnan para definir los aspectos “finitos”.
La idea es que el partido comience a las 19.15, y que el espectáculo previo arranque a las 18, con un in crescendo que tendrá su momento culminante minutos antes de las 19 con un repentino apagado de luces para que, con el fondo de una música intensa acompañados de rayos láser, desemboquen en el Monumental un par de helicópteros. De las máquinas descendería, para cantar uno o dos temas, alguna de los cantantes internacionales que el Gobierno tiene contratados y que pondría a disposición para este evento, siendo los nombres más probables los de Ricky Martin, Shakira, o el colombiano Carlos Vives, idolatrado por Maradona. De igual modo, un reconocido actor argentino (¿Ricardo Darín?) aterrizaría en el círculo central para llevar a cabo una lectura vinculada con el hecho histórico que se conmemora.
Por supuesto, que en semejante fiesta no podrá faltar la ejecución del Himno Nacional Argentino, que será entonado por el cantante Vicentico, quien estará acompañado, en un semicírculo, por todo el plantel argentino que jugará el Mundial más un grupo de “notables invitados” compuesto por viejas glorias del deporte nacional sobresaliendo, desde ya, los integrantes de los seleccionados que se consagraron campeones del mundo en Argentina ‘78 y México ‘86. También desfilarían, entre otros seleccionados recordados, planteles destacados de Los Pumas y Las Leonas. Tal vez, también, diga presente la presidenta Cristina Fernández de Kirchner o algún funcionario destacado del Gobierno.
Quienes tengan la posibilidad de acceder al Estadio adquiriendo su entrada por Ticketek a los mismos precios que costó ver el agónico triunfo ante Perú, en la última Eliminatoria Sudamericana, o estén sentados frente a la pantalla de Canal 7, se encontrarán, renglón seguido, con Fito Páez y su piano con el ya clásico “Y dale alegría a mi corazón”. Emoción garantizada.
Tal vez ese sea el final del show, antes del “cotillón” de ocasión que, por supuesto, incluirá los legendarios papelitos blancos y celestes. Y empezará a rodar la pelota, y a volar la imaginación de los tantos futboleros argentinos que querrán darle su voz de aliento a una Selección que, aun con tropiezos y varios pasos en falso, llegará a la cita mundialista con la firme ilusión de repetir viejas epopeyas a partir del extraordinario momento por el que atraviesan muchos de los jugadores que, finalmente, integrarán la famosa lista de 23. Después vendrá el debut ante Nigeria, y los choques con Corea del Sur y Grecia que permitirán establecer para qué está el equipo. Pero para esos capítulos, todavía falta. La primera cita será en Núñez, el 24.