viernes, 12 de marzo de 2010

Moraleja: cuando Cristina controla su discurso, el Gobierno hace política y gana

Alguien en el Gobierno tendrá que reconstruir la secuencia. El lunes 8, luego de pasar el fin de semana fuera del ojo público en El Calafate, Cristina Kirchner levantó una de sus acostumbradas cadenas nacionales y pronunció por canales de cable un discurso referido al Día Internacional de la Mujer. Risueña, abandonó su agresividad de la última semana y no habló de la oposición. El martes 9, la Presidenta almorzó con la CGT en Olivos se mostró conciliadora y desempolvó por ¿tercera? ¿cuarta? vez su convocatoria a un pacto social entre empresarios y sindicalistas.

Ese mismo mediodía comenzaron a cambiar las cosas. El senador pampeano Carlos Verna –hasta ese momento cercano a la oposición– se reunió con los oficialistas Miguel Pichetto y Nicolás Fernández y adecuó su proyecto de ley sobre el uso de reservas del Central al gusto exacto del Gobierno. Pasaron sólo unos minutos antes de que la Presidenta pidiera cámaras de televisión en la Casa Rosada para decir que le gustaba el proyecto de Verna.

Los hechos del miércoles –con el estallido de la oposición– y del jueves –con el desvanecimiento del quórum para rechazar el pliego de Mercedes Marcó del Pont, tratar la ley del cheque y cuestionar al directorio del BCRA– están más frescos en la memoria, pero sirven para terminar el recorrido lógico: cuando el Gobierno se calla o se detiene unas horas a pensar, la oposición vuelve a ser lo que es, un conglomerado multicolor de partidos con mayor o menor consolidación y de proyectos personales con mayor o menor figuración.

La Casa Rosada había tomado nota de ese detalle (existen decenas de declaraciones de ministros y de la propia Presidenta o de su marido calificando a la oposición como un rejunte) pero sorprende que haya tardado tantos meses en entenderlo. Acá y en la luna, la dispersión del adversario es una ventaja del grupo propio. El hecho de que la oposición sea un pastiche no hace más que favorecer al Gobierno, que todavía, mal que mal, mantiene dos bloques muy numerosos en la Cámara de Senadores y de Diputados unificados bajo la sigla del Frente Para la Victoria. Lo único que tenía que hacer la Presidencia era parar, aunque sea por un par de días, de dispararse a sus propios pies y ensayar negociaciones con uno o dos de los pequeños fragmentos que se habían anotado sin demasiadas convicciones en la oposición.

Ayer fue el propio Néstor Kirchner el que se encargó de retroceder –perdón por el vocablo, señor diputado– y ensayar negociaciones con algunos senadores. Al mediodía, llamó por teléfono a un movedizo funcionario peronista y le pidió precisiones sobre una conversación que había tenido ese mismo día con el Gobernador de Corrientes, Ricardo Colombi. “¿Lograte convencerlo con lo de los senadores?”, preguntó Kirchner. “Sí”, respondió el peronista. “Bueno, entonces hablale a De Vido para que llame a Colombi”, dijo antes de cortar el diputado como si todavía fuera Presidente. ‘Llamalo a De Vido’ tiene el mismo significado hoy que en 2003. Quiere decir ‘Manden la plata para las obras que necesita el Gobernador’. Con la santafesina Roxana Latorre y con la rionegrina María Bongiorno habían arreglado el día anterior.

¿Es eso un pecado? No. Se llama hacer política. Se llama negociar con inteligencia. Se llama buscar coincidencias con personas del mismo partido o de sectores cercanos. Se llama evitar la confrontación ineficiente. Se llama, tal vez, dejar de autoboicotear la economía que –según evalúan incluso los analistas más alejados del Gobierno– estaba preparada para mostrar tasas de crecimiento fabulosasas este año y que fue detenida sólo por la impericia verbal de los Kirchner.

Por supuesto, la oposición se sentirá frustrada. Creerán que fueron traicionados. Pensarán que resultaron víctimas de una jugarreta política. Eso dirán los más verborrágicos. En el fondo, esperarán pacientes a que Cristina o Néstor Kirchner vuelvan a los discursos flamígeros anunciando modificaciones administrativas o contables como si fueran la reforma agraria. Si el matrimonio hace eso otra vez, la unión de los opositores resurgirá mágicamente.

6 comentarios:

  1. Anónimo15/3/10

    si lo hace che inutil escribiente es porque hay inteligencia jjaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa se viene kastro y dipalma tiene gastritis del emprendimiento de la radio plaplaplaaaaaaaaaaaa

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  2. Anónimo15/3/10

    LA CRISTINA KISNER LE HA ENSEÑADO HA MAS DE UN ARGENTINO HA HACER PLATA NUNCA MAS VA HACER PLATA EN LA ARGENTINA COMO HAN HECHO EN TIEMPO DE LOS KISNER. LOS DEL CAMPO LOS EMPRESARIOS Y COMO TAMBIEN ATRASADOS HACE 15 AÑOS POR LO MENOS, HAN MEJORADOS LOS SALARIOS ESTO ES HISTORIA AHORA PERO CON LA IDEA PLANTEADA POR LA OPOSICION EL PUEBLO ARGENTINO SE VA HA CAGAR DE HAMBRE COMO EN EL 2001

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  3. Anónimo15/3/10

    Grande Presidenta ,hay Cristina y Nestor por variosssss años mas.
    Estos dos sacaron al pais de la ruina,que van a hablar los radicales si siempre nos endeudaron y abandonaron el barco antes,son unos muertos,jajajajaaaaa

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  4. Anónimo16/3/10

    El radicalismo nunca fue capaz de conducir el pais,la historia asi lo demuestra,corruptos-incapaces-inutiles-nunca llegan a ningun lado,siempre el peronismo se ha tenido que hacer cargo de las cagadas de estos atorrantes e ingeniarselas para sacar el pais adelante.
    Vamos Cristina y Nestor todavia o que no se acuerdan ya del 2001,hambre saqueos y represion,como una rata salio el payaso de delarua y tambien la porqueria de Mestre que tanto daño hizo hasta demantelo los colegios tecnicos y quirene venir a dar catedras Aguad-Mestre hijo-Faustinelli,etc son todos la misma bosta con diferente olor.
    En el 2011 cuando mueva un par de pieza la presidenta Nestor le rompe el culo en las urnas de vuelta y asi tendremos un pais que nos merecemos

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  5. Anónimo17/3/10

    Es verdad no hay peor mugre que los radicales para nuestro pais,ahora se llaman oposicion y no se les cae una idea a los estupidos estos,quieren ver lo que dan los radicales no nos vayamos lejos miremos aqui en nuestro pueblo ,una sarta de corruptos e incapaces que lo unico que han logrado es endeudar y atrazar a nuestra ciudad.Por favor Aguad,Faustinelli,Mestre que se olvidan del megachoreo que hicieron en Corrientes todavia tienen causas abiertas dando vueltas y quieren a nuestra provincia la dejarian como a Rio Segundo en ruinas para toda la historia.
    Radicales muertosssssssssssssssss.no existen ustedes se cavaron su propia tumba por los gobiernos que hicieron

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