La buena:
- Los bancos vuelven a creerse entre sí: y por eso cae la tasa interbancaria. “Cuando la tasa entre bancos sube -dice Blejer- es que un banco piensa que el que le pide plata tiene una cartera tan o más mala que la suya propia”.
- Cae el índice Vix o “variable de pánico”, una suerte de re-aseguro contra la volatilidad de las carteras. Llegó a picos de 65 cuando Lehmann Brothers y ahora está en 25, un indicador pre-crisis.
- China redondeará un crecimiento anual del 8,3% a 8,5% este 2009, pese a la crisis mundial (hubo “desacople”, entonces). Brasil se recupera y quizás cierre un año levemente positivo en su PBI, con un pronóstico de crecimiento de 3% para el 2010.
- Además, se recupera el flujo de capitales hacia los países emergentes.
U$S 900.000 millones en 2007
U$S 400.000 millones en 2008
U$S 140.000 millones en 2009
U$S 500.000 millones en 2010
- El crecimiento de China (y su demanda de commodities), la recuperación de Brasil (y su demanda de autos) más el flujo creciente de capitales a los países emergentes, todo eso, significa que vuelve el “viento de cola”, quizás no con la intensidad de años anteriores, pero sí marcando un contexto mundial muy benigno para la economía argentina. Además, el sector privado argentino -empresas y familias- se encuentra sin endeudamiento, otra ventaja para el contexto.
- Amenaza I: el precio de petróleo. Si se mantiene entre U$S 60 y 80 el barril, estamos en un nivel que no complicaría la recuperación.
- Amenaza II: cómo se apliquen las “exit politics”, las políticas de salida a este fabuloso impulso que los gobiernos dieron a sus distintas economías para pasar el mal momento. Es importante que el timming técnico y político sea lo más acertado posible para no abortar la recuperación ni acelerar algún proceso de inflación (en EE.UU. sobre todo).
La mala:
Con un enfoque que se centró en el problema político de la Argentina (un gobierno débil al que la gente no le cree y al que todos van a manguear), Juan Carlos de Pablo habló casi como un psicólogo-social en el Coloquio de la UIC que cerró ayer en Sheraton: “la gente no cambia -dijo-; los Kirchner son así y nos deberíamos concentrar en cómo enfrentar nuestra realidad puesto que ellos no van a cambiar. No esperemos que pase nada”. Por qué cree que vendrán más tarifazos y la tercera opción (además de suicidarse o emigrar), en la particular visión de De Pablo:
- Durante los últimos años los economistas fuimos los malos de la película, los agoreros, los noventistas, todo porque decíamos que había que ajustar las tarifas de a poco. Hasta que el gas llegó con aumentos de hasta el 600%. Ahora que lo explique Kirchner. A este tarifazo y a los que irremediablemente van a venir, porque es la única forma de achicar el gasto en lo inmediato.
- Nuestro país es extremadamente personalista. No queremos que a los Kirchner le pongan límites las instituciones sino que estamos buscando quién los “emboque” y nos alegramos con eso. Ahora que están débiles todos se les animan y van a manguearle: Moyano y los Gordos por aumento de salarios y más beneficios para sus gremios, los del campo para menos retenciones, los industriales por los reintegros del Iva y la oposición pidiendo menos impuestos y más beneficios sociales. ¡Fantástico! El tema es que esa cuenta no la cierra ni Magoya.
- Así las cosas, nos quedan tres alternativas:
1) Suicidarnos (siempre es una alternativa)
2) Migrar (pero si vinieron a este Coloquio no deben estar pensando eso)
3) Enfocarnos en hacer lo que mejor sabemos, mejor que nuestra competencia. Si tengo una pizzería, la actitud sería: si alguien va a vender una porción de pizza en esta ciudad, ese voy a ser yo. Con esto no voy a poder eliminar la crisis, pero al menos sí mitigar sus efectos en mi negocio.